de Burhan Sönmez

Barcelona, Ed. Minúscula, febrero del 2022.
(traducción de Gaizka Etxeberria)
146 pàgs.

«Primero se interesaron por las costillas, después se preguntaron lo que le ocurría a aquel hombre que trataba de rehacer su vida a partir de una costilla rota y una memoria perdida.»

Una novela extraordinaria que se cuestiona la identidad individual y la colectiva, mientras pasea al lector por calles recónditas de Istanbul (y por las profundidades del alma).

«Los muertos pueden volver a morir en cualquier momento y en cualquier lugar. Yo puedo volver a nacer. Cuando abrí los ojos en el hospital, me podría haber dicho que yo era otra persona, alguien cuyos padres están vivos. Me podría haber librado de una infancia huérfana. Doctora, sabe, había una vez un ciempiés que era el centro de atención de todos. Tenía unos andares elegantes y bailaba muy bien. Un día le preguntaron: ¿en qué orden da sus elegantes pasos? ¿Da el primer paso con el séptimo pie derecho y el siguiente con el decimocuarto izquierdo? El ciempiés se dio cuenta de que hasta entonces no había pensado en los pasos que daba. Empezó a caminar curiosop y a tratar de comprender en qué orden daba los pasos. Se le empezaron a enredar los pies, no sólo se olvidó de bailar, incluso era incapaz de caminar recto. En mi vida anterior yo vivía según las costumbres, como todo el mundo. Al perder la memoria, me he visto obligado a pensar en los detalles. La obligación de recordar un tiempo que no recuerdo. Me tropiezo. Al caminar por la calle me choco con la gente. El calendario que tengo en la cabeza está confundido.»