Curso nuevo, aula nueva, en un Ateneu de Sant Just Desvern que ultima las obras para modernizar su interior y acomodar mejor, de esta forma, la cantidad ingente de activitades que promueve y genera -¡cuanto más va, más! Casi podríamos considerarlo el solenoide cultural sanjustense, o sea que ninguna otra casa hubiera sido mejor para acoger el debate sobre esta magna obra del autor rumano Mircea Cartarescu, flamante ganador del Premio Formentor de las Letras y una de las voces más admiradas  por todo el continente. Para hablar de él con un conocimiento más profundo y resolver dudas invitamos a Antònia Escandell, traductora de Solenoide al catalán.

Era una lectura arriesgada, una opción para el verano que podía echar para atrás a muchos de los lectores, pero la verdad es que no dejó indiferente a ninguno de los integrantes del club. Si bien algunos acabaron hasta el gorro de sus sueños y manías. Lean a continuación un fragmento de la crónica de la sesión [que pueden leer entera (sólo en catalán) en este blog]:  «La sorpresa fue que la revolución se produjo en sentido contrario: como imbuidos del espíritu cartaresciano, los asistentes a la primera reunión del Club de los Martes de la temporada 2018-19, se lanzaron a charlar sobre las obsesiones y la escritura torrencial del autor de forma casi compulsiva y atropellada. Por un lado, se alababa el conocimiento profundo que el autor demuestra sobre muchos temas: desde la entomología a la física cuántica, pasando por las matemáticas o la fisiología humana; mientras que por el otro, se ponía el énfasis en la no-estructura de la novela, la riqueza de las descripciones de Bucarest, gran protagonista de la obra; y, aún, por otro rincón, se subrayaban los constantes homenajes literarios que Cartarescu hace a autores como Franz Kafka o Jorge Luis Borges